¿Por qué el estrés es malo para mis dientes?
Cuando la presión comienza a aumentar en tu vida profesional o personal, tu cuerpo libera dos hormonas llamadas adrenalina y cortisol.
La adrenalina aumenta el ritmo cardíaco, aumenta la presión arterial y el suministro de energía. El cortisol, que es la principal hormona del estrés, eleva los niveles de azúcar y aumenta la disponibilidad de sustancias químicas y hormonas que reparan los tejidos.
Estas hormonas desencadenan la respuesta de “lucha o huida” de tu sistema nervioso. Si tu cuerpo produce estas hormonas durante largos períodos de tiempo, puede afectar negativamente tu salud bucal.
Cuando estás estresado, tu cuerpo se deshace de los minerales «buenos» y, en cambio, aumenta las bacterias ácidas que causan caries. Además de esto, es más probable que tu tomes malas decisiones dietéticas cuando estás estresado por depender de tus alimentos favoritos, como el chocolate, los dulces, la cafeína, la nicotina y el alcohol. Todos estos alimentos están relacionados con las caries.
También existe un mayor riesgo de enfermedad de las encías
Cuando estás estresado, lo último que tienes en mente es la higiene bucal. El cepillado y el uso de hilo dental con regularidad pasan a un segundo plano frente a la preocupación por todo lo demás. Pero es especialmente importante cuidar tus dientes y encías durante este tiempo.
Dado que el estrés puede dañar tu sistema inmunológico, esto puede provocar una inflamación crónica de las encías, lo que eventualmente provocará una enfermedad de las encías. Con el tiempo, esta enfermedad dañará los huesos que sujetan los dientes en su lugar, lo que provocará la pérdida de los mismos.
Si no se trata, tu enfermedad de las encías puede ponerlo en riesgo de sufrir complicaciones menores, como un resfriado ocasional, o enfermedades graves como enfermedades cardíacas o incluso cáncer.
Si la placa dental no se elimina, esta se convertirá en sarro, lo que dificultará su posterior eliminación.
¿Por qué el estrés es malo para mi mandíbula?
¿Alguna vez has notado que aprietas más la mandíbula cuando estás estresado? Quizás no sepas que lo estás haciendo hasta que algo te relaje y luego sientas que parte de la presión desaparece. Si no sabes que lo estás haciendo cuando estás despierto, imagina lo que sucede cuando estás durmiendo.
El nombre técnico para rechinar y apretar la mandíbula se llama bruxismo. Puede ser provocado por muchas cosas, incluido el estrés, y puede dañar gravemente los dientes y la mandíbula.
Este nivel de fuerza puede ser responsable de muchos problemas estéticos y estructurales, entre ellos:
- -Dolor en la cabeza, el cuello o la mandíbula.
- -Empastes o dientes rotos
- -Trastorno de la articulación temporomandibular (ATM)
- -Dientes amarillentos
- -En algunos casos graves, el bruxismo puede debilitar y aflojar el hueso que rodea los dientes y provocar su caída.
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